Trabajar en una agencia de publicidad y marketing es como adentrarse en una «selva creativa» donde cada personaje tiene un rol tan específico como peculiar. Desde el creativo que se ilumina como una bombilla en medio de la tormenta hasta el estratega que ve la vida en gráficas y datos, cada uno es un «peazo» de profesional con más carácter que una tapa bien servida en pleno Albaicín. Si alguna vez te has preguntado quiénes son esos personajes con los que compartes café y ideas, aquí tienes una descripción nada seria (pero muy sincera) de esta fauna.

Trabajar en una agencia es como estar en una sitcom: cada personaje tiene su papel, sus manías y sus frases célebres. Entre el diseñador buscando «el azul perfecto», el copy haciendo poesía de una naranja, y el social media obsesionado con hashtags, a veces parece que la creatividad se nos va en eso… ¡y no en el cliente! Pero al final, todos sabemos que este caos creativo es lo que hace que cada día aquí sea tan divertido (y un poquito loco).

El Creativo “Iluminado” 💡

Frase clásica: «¿Y si el mensaje es solo un concepto… pero en realidad es el universo tratando de hablarnos?»

El creativo vive «apollardao» entre sus pensamientos profundos y alguna que otra «guasa» de inspiración divina. Mientras tú te preguntas si es hora de almorzar, él sigue decidiendo si el mensaje de una campaña necesita un toque de existencialismo o si le falta «arte». Sus ideas suelen aparecer media hora antes de la presentación al cliente, momento en el que parece haber experimentado una epifanía. Si le preguntas cómo hace su magia, probablemente te diga que “aún no está listo, pero falta poco” (y lleva diciendo eso dos semanas).

Kit de supervivencia: Un bloc lleno de garabatos incomprensibles, un café frío y un playlist de música indie (con un toque de filosofía).

El Diseñador (el “artista torturado”) 🎨

Frase clásica: «Este azul es demasiado azul, necesito un azul que sea más… como un suspiro.»

El diseñador, con sus más de 47 pestañas abiertas y un historial de café frío, vive en un «mundo paralelo». Se comunica en idiomas como «CMYK» y «RGB», y si alguien menciona Comic Sans, su «foh» se oye en toda la oficina. No pasa un día sin que esté al borde del colapso por una revisión de última hora, pero es quien transforma las ideas de los demás en algo visualmente atractivo. Cada cambio de color es para él una lucha interna, un «no ni ná» que se convierte en «quejío» cuando el cliente le pide «hacerlo más grande».

Kit de supervivencia: Pantalla adicional, gráficos vectoriales y una reserva interminable de café (que seguirá frío, claro).

El Copywriter (el “poeta de oficina”) ✍️

Frase clásica: «Llamadme loco, pero este exprimidor de naranjas necesita una historia de fondo.»

Para el copywriter, todo en el mundo tiene una historia esperando ser contada, incluso el sacapuntas de la oficina. Su pasión por las palabras lo lleva a convertir un producto tan simple como un desatascador en una «herramienta de reinvención para el hogar». Es la persona a la que le fascinan las metáforas y no pasa un día sin que se quede «engurruñío» buscando el sinónimo perfecto. Su frase favorita es «esto no suena bien», y para él, cada palabra cuenta una historia profunda (aunque sea la descripción de un cepillo de dientes).

Kit de supervivencia: Diccionarios de sinónimos abiertos, café y alguna que otra frase inspiradora pegada en su escritorio.

El Social Media Manager (el amo de los hashtags) 📲

Frase clásica: «¿Sabías que #Love tiene 1.8 billones de posts? Pero vamos, lo nuestro es único.»

El Social Media Manager es ese personaje que parece vivir en un universo paralelo lleno de «likes», «hashtags» y memes. Conoce todas las tendencias antes de que tú sepas que existen y sabe exactamente cuándo lanzar un post para que se vuelva viral. Su capacidad para saber lo que funciona en redes es asombrosa, y su amor por los hashtags podría considerarse una ciencia. Vive atrapado en un bucle entre crear contenido y responder mensajes, y aunque a veces parece «ehnortao», en realidad está planeando su próximo golpe maestro en redes sociales.

Kit de supervivencia: Un arsenal de memes, conexión rápida a internet y su propio cronograma de publicaciones.

El Ejecutivo de Cuentas (el diplomático de la agencia) 💼

Frase clásica: «No te preocupes, yo le explico al cliente que su logo no puede ocupar toda la pantalla.»

El ejecutivo de cuentas es el héroe anónimo de la agencia. Es esa persona que, con paciencia infinita, actúa como el enlace entre el cliente y el equipo creativo. Su habilidad para escuchar y calmar los ánimos es clave, y aunque cada correo parece una oportunidad para perder la calma, él siempre lo enfrenta con una sonrisa (por fuera, claro). Para él, cada día es una prueba de paciencia y diplomacia; su arte consiste en traducir el “esto no me convence” del cliente a algo que el creativo pueda entender sin sufrir un infarto.

Kit de supervivencia: Teléfono en modo recarga continua, post-its de colores y una dosis diaria de meditación.

El Estratega Digital (el gurú de las métricas) 📊

Frase clásica: «¿Sin datos? Lo siento, pero para mí eso es como no tener internet.»

Este personaje vive y respira por las métricas. Todo lo ve en forma de gráficos y todo lo mide en función de KPIs, CTRs y ROI. Mientras el resto del equipo sueña con ideas y colores, el estratega digital se emociona con una gráfica de Google Analytics o un informe de conversiones. Su frase favorita es “sin datos, solo es una opinión”, y en su mundo, nada tiene sentido si no está acompañado de un buen análisis. Y, aunque a veces su visión numérica parece un «peñazo», sus datos suelen ser la base que hace posible todo lo demás.

Kit de supervivencia: Una tabla de Excel siempre abierta, Google Analytics y un gráfico que muestra el camino al éxito (o eso cree).

El Community Manager (el “camarero digital”) 🥤

Frase clásica: «Por supuesto que le respondí a tu mensaje a las 3 a.m. ¡Soy un community con vocación!»

El Community Manager es la voz de la marca en el mundo digital, el que se enfrenta a todos los comentarios, buenos y malos. Su habilidad para responder con diplomacia es admirable, y cuando se encuentra con un troll, sus respuestas se vuelven tan creativas como diplomáticas. Su vida es una constante notificación, y aunque en ocasiones parece «cansino», es capaz de contestar a cada mensaje como si fuera el primero del día.

Kit de supervivencia: Un teclado rápido, la habilidad de detectar trolls y una reserva infinita de paciencia.

El Fotógrafo (el “cazador de momentos”) 📸

Frase clásica: «Este ángulo no capta la esencia… necesitamos más luz, pero natural, ¿entiendes?»

El fotógrafo de la agencia es un “artistazo” de los buenos, siempre con la cámara colgando y esa mirada que parece ver “to” lo que los demás no ven. Es el encargado de capturar la “grasia” de cada campaña, y si algo no está en su sitio, no se corta un pelo en decirte “cucha, que esto no tiene ni chispilla”. Le pidas lo que le pidas, siempre insiste en el “toque natural”, y si el encuadre no le convence, agárrate porque te hace repetir la pose hasta que sale “de categoría”.

Kit de supervivencia: Su cámara siempre lista (con algún que otro “maquinillo” de repuesto), una obsesión por la luz de la tarde “alpujarreña” y una capacidad infinita para decir “quillo, ahí no” hasta que salga la foto perfecta.

El CEO o Director (el “Gran Jedi”) 👔✨

Frase clásica: «¿Enfoque disruptivo? ¡Eso significa que vamos a cambiarlo todo! …otra vez.»

Esta es la “mihilla” del equipo, la persona con una visión tan amplia que a veces asusta. Para él, cada semana trae una idea nueva para revolucionar la agencia. Su lenguaje está lleno de palabras como “disruptivo”, “escalabilidad” y “visión a largo plazo”. Su habilidad para generar ideas es inspiradora, aunque para el resto del equipo, sus nuevas “estrategias disruptivas” pueden sonar tan caóticas como cambiar de color en cada reunión. Pero al final, es quien mantiene a la agencia en pie y quien da el visto bueno para cada locura creativa que se pone en marcha.

Kit de supervivencia: Agenda llena de reuniones, café personalizado y el poder de decidir el rumbo de la agencia (aunque nadie sepa muy bien cuál será el próximo).

En una agencia, cada perfil es único y esencial. Si trabajas en una, seguro que reconoces a más de uno (¡o te reconoces a ti mismo!). Todos ellos, con sus “chuminás” y rarezas, son los ingredientes que hacen que cada campaña sea posible y cada idea cobre vida. Porque en el fondo, la creatividad en una agencia de marketing es una mezcla de arte, datos y un “jartón” de paciencia. ¿Con cuál te identificas? Déjanos un comentario para saberlo y deja tu «huella» en esta jungla creativa.

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